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¿Cuándo llevar a un niño al traumatólogo?

Marzo 31, 2022
¿Cuándo llevar a un niño al traumatólogo?

En la pubertad, entre los 10 y los 16 años, los niños experimentan los primeros cambios físicos y hormonales. Crecen en estatura, aumentan la musculatura y ganan peso, lo que se conoce popularmente como dar el estirón. Estos periodos de crecimiento acelerado vienen acompañados, en muchas ocasiones, de ciertas alteraciones en el aparato locomotor que, diagnosticadas a tiempo, permiten evitar futuras complicaciones en la edad adulta.

¿Tu hijo se queja de dolor de espalda?, ¿notas que anda encorvado?, ¿le duelen los talones?, ¿tiende a caminar con las rodillas hacia adentro? Preguntamos al Dr. Ferran Torner, traumatólogo y cirujano ortopeda de CreuBlanca y Jefe de la Unidad de Tumores y Accidentes de Tráfico del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, sobre la importancia de las revisiones traumatológicas en adolescentes.

Revisiones en etapas de máximo crecimiento

La adolescencia es una etapa donde los niños empiezan a ganar autonomía. Dejan de ser dependientes con respecto a los adultos para realizar algunas acciones cotidianas como ducharse, practicar el deporte que les gusta o escoger cómo vestir y calzarse.

“Esta transición es natural y necesaria para su desarrollo personal, sin embargo, ya sea por rebeldía o por vergüenza, muchas veces esconden ciertos problemas o molestias que afectan a su salud física e imagen corporal”, explica el Dr. Torner. “Los padres suelen ser quienes detectan que algo no va bien y deciden consultar con un especialista”, añade.

La mayoría de deformidades que afectan a los huesos y las articulaciones de adolescentes no suelen ser dolorosas ni interfieren en su vida cotidiana, por lo que muchas veces no se les da mayor importancia. No obstante, con el tiempo pueden derivar en patologías más graves.

“Por esta razón, los traumatólogos recalcamos la importancia de realizar una revisión anual a niños de entre 11 y 15 años como método de prevención y diagnóstico precoz”, destaca Torner.

¿Qué examinamos en una revisión traumatológica pediátrica?

Las revisiones traumatológicas destinadas a niños y a adolescentes aparentemente sanos tienen como objetivo examinar, diagnosticar y tratar patologías que afectan a las principales áreas del aparato locomotor:

  • Columna vertebral

Revisar la curvatura de la espalda en la pubertad es fundamental para descartar la presencia de escoliosis. Tener un hombro o una escápula más alta que la otra puede ser indicativo de esta patología.

  • Rodillas

Pequeños traumatismos repetitivos durante la práctica deportiva pueden provocar la aparición de dolor en las rodillas y generar molestias a nivel de los cartílagos de crecimiento.

Por otro lado, también es conveniente revisar la alineación de las rodillas respecto a las caderas y los pies. El genu valgo (rodillas en X) o el genu varo (rodillas en paréntesis) son las desviaciones más frecuentes en pacientes jóvenes. El traumatólogo y ortopeda infantil puede buscar soluciones para compensar este tipo de desequilibrios y evitar el deterioro de la articulación.

  • Caderas

Las asimetrías entre las piernas o caderas son alteraciones muy comunes entre niños en pleno desarrollo. Este tipo de deformidades suelen ser prácticamente imperceptibles, pero deben revisarse y ser corregidas en edades tempranas.

  • Pie, tobillo y talones

El dolor puede originarse en diferentes partes del pie, done las molestias son también frecuentes en las épocas de mayor crecimiento.

  • Dolor muscular y articular generalizado

Cuando el adolescente se queja de dolor generalizado, la revisión debe focalizarse en averiguar el tiempo de evolución del dolor, si se trata de un dolor constante o intermitente, si ocasiona cojera, fiebre o malestar general, si interrumpe el sueño o limita su actividad deportiva normal, o si es necesario el uso de analgésicos.

En la Unidad de Traumatología y Cirugía Ortopédica de CreuBlanca contamos con un área especializada en niños y adolescentes de entre 10 y 16 años, enfocada única y exclusivamente al diagnóstico y tratamiento de patologías que afectan al aparato locomotor en etapas de máximo crecimiento. Liderada por el Dr. Ferran Torner y dotada de los mejores equipos diagnósticos, tiene como objetivo encontrar la causa de la lesión y, posteriormente, aplicar un tratamiento personalizado y mejorar el pronóstico de la patología.


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